Todos los dioses, todos los cielos, todos los infiernos están dentro de ti

Psicología en un combate:
En mi post anterior sobre El Camino de un guerrero, hacía referencia a los peligros que podemos encontrar durante el servicio activo como miembro de unidades profesionales para el servicio de la defensa y protección de sus ciudadanos o empresas privadas.
Uno de estos peligros era caer, con el paso de los años, en un estado mental negativo, motivado por la frustración en el desempeño de las funciones propias como profesional armado.
Como muchos autores de grandes trabajos nos han mostrado en sus libros y artículos (Cecilio Andrade y Ernesto Pérez Vera, entre otros), el enfrentamiento armado, el combate, no entiende de frustraciones personales.
En la lucha por la supervivencia, en el combate entre seres humanos en los conflictos armados, en situaciones defensivas como policía, vigilante de seguridad o en el curso de una intervención en la persecución del delito, debemos tener un estado mental positivo, visualizando la victoria, convencidos de que nosotros prevaleceremos; sobreviviremos!!

«Debo encontrar el «ritmo» y aprender a trabjarlo y aceptarlo desde la parte trasera de mi nuca, no desde los ojos»
Lo que no nos cuentan:
Debemos ser conscientes de que nuestro cuerpo va a experimentar unos cambios fisiológicos, motivados por el estrés al que vamos a ser sometidos en el combate, lo que afectará a nuestra capacidad de respuesta en la lucha por la supervivencia.
A mayor nivel de estrés, mayor deterioro de nuestras capacidades motrices finas, mayor tiempo de reacción en el ciclo O.O.D.A. (Observar, Orientar, Decidir, Actuar), derivado del colapso del cerebro y por lo tanto, menor índice de supervivencia.
Debemos saber que nuestra visión, audición, voz, riego sanguíneo, vejiga, recuerdos, pensamientos, nivel de consciencia y capacidades meta-cognitivas se verán afectados de forma significativa.
Debemos saber que, en niveles extremos de estrés, vamos a sentirnos superados, se activará nuestro instinto más primitivo de «Lucha o Huida«, o peor aún, «Parálisis temporal«, «Congelación«, imposibilitando a nuestro cuerpo huir; en definitiva, capacidad para combatir, intervenir o defenderse.
Debemos saber que, tras un incidente crítico a vida o muerte, después del combate, intervención o defensa ante agresión armada, necesitaremos compartir nuestra vivencia, necesitaremos ayuda psicológica profesional, sentiremos alivio por haber sobrevivido, tendremos remordimientos llegado el caso por quitar una vida humana, pesadillas, insomnio, posibles reproches de compañeros, jefes o políticos por nuestra actuación.
Todos estos factores resumidos, han sido estudiados más en profundidad en otros trabajos realizados por compañeros, amigos y maestros y si quieren ser efectivos en su labor de servir y proteger deben empezar por trabajar el conocimiento de su propia mente, de su espíritu de lucha, dedicación y sacrificio por ser mejores personas cada día, y en definitiva, mejores guerreros.

Fernando Pérez Pacho durante su conferencia sobre el estrés de supervivencia en las JJAA gratuitas anuales de E3A.
Estrategias de preparación:
Los guerreros no son personas normales; su estado mental debe ser siempre positivo, vigilante, buscando y observando en el entorno que le rodea.
Su estado mental será el de alerta, estando de servicio o fuera de servicio, dado que El Camino que ha elegido es el de servir y proteger. Se conoce también como fase Amarilla.
Hace poco tiempo hemos asistido atónitos a la magnífica labor, aptitud mental, espíritu de lucha y voluntad de vencer de unos soldados americanos fuera de servicio de vacaciones en Francia. Estos soldados, percibieron una gran amenaza por parte de un individuo armado con armas de alta velocidad, y portador de dos armas más ocultas que se había subido al tren en el que viajaban con intención de realizar una masacre.
Antes de que el terrorista pudiese reaccionar, estos guerreros detectaron la amenaza y no dudaron en intervenir en un combate cuerpo a cuerpo para reducir al terrorista, el cual, pudo herir con sus armas secundarias y ocultas a uno de los guerreros.
Este ejemplo de determinación y valentía, propio de guerreros con una actitud mental positiva, voluntad de vencer y un buen entrenamiento cuerpo a cuerpo, posibilitaron que no hubiese ningún herido, en lo que se hubiese convertido en una matanza segura.
Otro factor a tener en cuentra es la preparación realista: física, técnica, táctica y de tiro como guerreros, así como el conocimiento de las leyes que amparan el derecho y legalidad de nuestras actuaciones.
Esto nos lleva a entrenar, entrenar y entrenar, todo tipo de opciones y posibilidades, es decir, escenarios tácticos de enfrentamiento y como dar soluciones a las mismas. Así conseguiremos autoconfianza mental, si nuestro entrenamiento es realista y cubre todas las aéreas que se necesita como profesional armado.
Estrés y efecto tunel
El principal factor que puede hacer que un ser humano sobreviva al enfrentamiento criminal o al menos lo intente hasta agotar los últimos recursos es, LA MENTE
Más Artículos y Noticias
Distancia de uso de escopeta (parte II): Proyectiles
Siempre digo que la escopeta es una gran desconocida, con sus limitaciones por capacidad de carga y tipos de municiones. A mí me gusta definirla defensivamente como un “arma de zona” por la superficie que llega a cubrir con sus impactos, la cual empleando la munición adecuada permite obtener diversos efectos.
Últimas prácticas presenciales OIS 2020
Última fase del módulo práctico del curso de postgrado de Experto Universitario en Operaciones Internacionales de Seguridad titulado por la Universidad a Distancia de Madrid UDIMA
Distancia de uso de escopeta (parte I): Municiones
He tenido recientemente alguna consulta relativa al manejo “táctico” (el término de moda) de la escopeta y después de dar varias respuestas a cada cual más variada me he decidido a redactar esta nota básica con mis impresiones relativas a la munición, los elementos de puntería habituales y la distancia de puesta a cero de los mismos cuando sea posible hacer esta.
Gracias por la informacion.
La pregunta que nos hacemos todos es: ¿Estaré preparado? La respuesta es SI, no por el entrenamiento ni por los cartuchos gastados en un campo de tiro. Si eliges el camino del guerrero no importa la situacion, no importa lo que tengamos en frente, es lo que esperan de nosotros, para lo que hemos nacido para lo que nos an adiestrado, no hay lugar para la duda en el camino del guerrero.
Un guerrero, debe de adaptarse, de activarse, al terreno donde luchara, sea un campo o sea un vagón de tren… me refiero a su estado mental, ese estado que a estado preparando a base de entrenar posibles situaciones, de aceptar el momento que vivimos, observar todos los elementos que le rodean, esos daños colaterales que se pudiesen devenir de su actuación, no podemos ser viscerales… por ejemplo en este post se alude a los soldados americanos que de permiso de vacaciones en Francia actuaron como héroes y repelieron el ataque del enemigo. Estos soldados actuaron por que el mal que hubiesen podido ocasionar no hubiese sido en ningún caso mayor que el que se hubiese causado sin su heroica intervención, ya que este desalmado iba con un clara intención, matar!!! ellos antepusieron sus propias vidas a ello, pero lo hicieron sin pararse a pensar, simplemente valoraron la amenaza y el mal que se podía haber causado en coste de vidas ajenas y entonces «CLICK», el resorte del guerrero salto y actuaron aún a coste de perder la vida, su preparación física para el combate, su adaptación mental al conflicto armado y su espíritu de lucha de querer vencer de repeler al mal a toda costa, los llevo al éxito de la misión.